miércoles, 20 de agosto de 2008

Desgarro

La ocultación casual de la palabra
que me muestras en estas horas tempranas,
ahondan como un obus certero en mis entrañas
y las dañan hasta desgarrarlas.

Desgarro interno por no tener tu ser a mi lado,
querido amante en mil noches de desvelos,
en que mis silencios se convierten en tempestuosos truenos
al esperar esa deseada llegada,
que nunca llega, que nunca pasa
y que marca, una vez más mis horas cansadas.

Abandono cruel y eterno
de mis simples verbos
en tu boca por siempre espacidos.
LLamados y tragados por tu ser
como agua sanadora en los cuerpos raidos.

Ámame o déjame,
mis incipientes palabras te requieren
para seguir construyendo en el camino silente,
donde quizás un día converjan
nuestras almas, nuestras palabras
en nuevas e iluminadas mañanas.

No hay comentarios: